"Han sido los pueblos pequeños los núcleos de las culturas más poderosas, como diría el poeta inglés Lord Byron -Dios, como los cosecheros no sirven la esencia concentrada en copa grande-. Basta recordar en lo antiguo a la cultura tartesa o la cretense; y en lo más moderno, los Países Bajos, Dinamarca, Suiza".
Blas Infante, "Andalucía, Teoría y Fundamento Político".

miércoles, 6 de abril de 2011

CULTURAS Y RELIGIONES EN ANDALUCÍA



Los dioses de los tartesios eran los astros: el sol, la luna, la estrella matutina (Venus). La diosa Luna tenia un santuario en la isla frente a Mainake, que pertenecía al imperio tartesio (Avieno, 367, 429). La serie de los reyes tartesios comienza con Sol. En la ciudad turdetana de Acci (Macrob. I, 19, 5; CIL. II, 3386) se encuentra un dios solar, Neto, que reaparece en la vecina Lusitania (CIL. n, 365, 5278). En las monedas turdetanas se ven imágenes del sol, de la luna, de las estrellas (Movers, op. cit., 652; Delgado, Monedas autónomas de España, II). La estrella representa al planeta Venus, la mas hermosa de las luminarias celestes, la estrella matutina, que los tartesios adoraban además del sol y de la luna. El planeta Venus tenia un templo en la colina de Sanlucar, junto a la desembocadura del Betis264. Estrabon (140) lo atribuye a la Lux divina265; Mela (3, 4), en cambio, a Juno (Lucina). Lux divina ha dado su nombre al pueblo de Sanlucar.

El culto de los tres astros recuerda a Babilonia, y quizás procede de esta ciudad —al menos inmediatamente—, pero también puede ser uno de los elementos que testimonian del origen africano de los tartesios266. Además de los astros brillantes, adoraban también los tartesios las potencias oscuras del mundo subterráneo. Junto a la desembocadura del río Tinto, en el alto de Santa Maria de la Rabida, vio el marino massaliota un santuario dedicado a la diosa infernal. Los mitos griegos localizados en esta comarca: el lago Averno, el Tartaro, el perro de Geryoneus Orthos —hermano del can Cerbero—, el palacio estigio, sustentado sobre columnas de plata, aluden al culto indígena de las potencias subterráneas.

En la pequeña isla de San Sebastián, al oeste de Gades, es decir, en territorio tartesio, hallo el marino massaliota (Avieno, 315) el culto de una diosa marina que Avieno llama Venus marina, y que, por tanto el periplo llamaba, sin duda, Afrodite (Euploia). Era adorada en una gruta y pronunciaba oraculos267. Esta diosa marina se encuentra también en otras islas y promontorios de las costas españolas, por ejemplo, en las extremidades oriental y occidental de los Pirineos y en el cabo de Gata. La diosa parece también haber sido llamada Juno en algunos casos. Asi, por ejemplo, la Venus de Gades, según otros testimonios se llama Juno (Plinio, 4, 120); en el cabo de Trafalgar se adoraba a Juno (Plin., 3, 7; Ptol., 2, 4, 5) y asimismo, en una islita del estrecho de Gibraltar (Avieno, 353; Estrabon, 168).

Esa diosa habitante de los promontorios e islas costeras conviene perfectamente a un pueblo marino como los tartesios. Era, sin duda, la patrona de los marinos, como hoy son Nuestra Señora de Guardia, en Marsella, y Nuestra Señora de África, en Argel. Del mismo modo, en el banco de Salmedina, temido por los marinos, que esta a la entrada del río Tartessos, tenia su morada el viejo rey Geron, considerado sin duda como patrono de los marinos; tanto que los griegos lo confundieron con su dios marino Glaucos. Los tartesios y los focenses, al entrar en el río, dirigían sus preces al dios Geron-Glaucos. Otro patrón de los navegantes era el héroe Menestheo, que tenia templo y oráculo en el Puerto de Santa Maria.
(Por Adolf Schulten).

No hay comentarios:

Publicar un comentario